Hoy me cuenta la abuela que el niño ya está cansado, que no quiere más playa....y lo entiendo. Los niños necesitan cambios en sus quehaceres para sacar el máximo partido de cada situación. Siempre pasa, después de 21 días en la playa, vendrá con ganas de ver su habitación, sus juguetes, sus amigos, incluso a sus papás y a su hermana, por la que siempre me pregunta que dónde está y si se acuerda de él,... en definitiva, su entorno.
Al igual que una profesora en su día a día con ellos, ha de cambiar de actividad a menudo para que estén contínuamente motivados, ahora que llegan las vacaciones, tirarse a la bartola mola unos días, después.....después necesitan cambiar de nuevo, a veces es de ubicación, a veces de compañía y otras veces, de actividades.
Unos días con los abuelos están muy bien, pero aunque juegan mucho con él, no dejan de ser abuelos. Un niño necesita de más niños para relacionarse, así que me cuentan que el peque está como loco por volver a casa. Cuando hablo con él me dice "¿cuánto me queda? ¡4 días, bien! ¡2 días, bien!..." .
Mañana regresa ella, el viernes él..... ¡Se acabaron los 11 días de rodríguez que hemos tenido y disfrutado! toda una experiencia que seguramente repitamos el año que viene. En breve los C.L. juntos again, y con muchísimas historias por contar y escuchar.
Un beso.
3 comentarios:
Ya sabes..condición humana: para valorar las cosas no hay como perderlas o echarlas de menos.
Feliz reencuentro.
Sé de uno que se va a poner muy contento...
Aprovecha los dos días que te quedan de rodríguez!!!
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