El poder de una mirada

Las miradas hablan por sí solas. Con una mirada buscas y encuentras. Con una mirada calmas, felicitas y a veces, hasta te lo puedes comer. Una mirada puede derrotar al hombre mas duro y calmar un corazón herido. Hay muchos tipos de miradas, tantas como sentimientos hay en el corazón. Una mirada puede serlo todo en un momento determinado de nuestra vida.

Al cabo del día observamos, miramos, vemos todo lo que nos rodea. Contínuamente hacemos gestos con la cara (cejas, boca, ojos...) y también con movimientos corporales acorde al momento, lugar, compañía y situación que estemos viviendo. Algunos de ellos pasan más desapercibidos que otros, pero esos otros, quizás los que menos duran, son los que más peso emocional llevan.

Una vez mas digo eso de que nuestros hijos son pequeños, pero no tontos. Saben, si tú se lo has hecho ver así, lo que está bien y lo que está mal, y esta diferencia es necesaria para su caminar en la vida. Cuando estamos juntos nos miramos ¡qué se yo! ¿cientos de veces? ¿miles de veces?... pero hoy quiero referirme a ese cruce de miradas cuando él ha hecho algo que sabe no está bien. Ipso-facto su mirada me busca...¿buscando el qué?.... buscando mi aprobación desde luego que no, quizás buscando lo que ya sabe de antemano se va a encontrar, y es una reprimenda, pues sabe muy bien que lo que hizo no estuvo bien. No es una mirada larga, no, mas bien corta pero muy intensa.

El otro día, como otros tantos, ocurrió la situación delante de mi madre y luego, hablando con ella de lo que pasó, me dijo...."¡leches, mira como sabe quién es su madre!, de tonto no tiene ni un pelo, pues no es listo ni na'.... si sabe muy bien cuando hace algo mal, ¡vaya que sí!!"... y es que ella es abuela y puso calma en el momento, apaciguó el ambiente, pero sin dudarlo, ella hubiera actuado igual si en vez de abuela hubiese sido madre....¡te lo digo yo por experiencia! je,je,..

Me acuerdo de mi madre en mi infancia y sé que siempre ha estado ahí, ha dado lo mejor de ella siempre a sus cuatro hijos, aunque cuando una es chica no se es consciente ni por lo mas remoto de todo aquello que hace tu madre y con tanto esfuerzo..... pero recuerdo sus pellizcos de monja si cruzaba la línea, nadie se enteraba más que yo, no llamaba la atención de nadie, pero a mí ya me daba el 2º aviso si con su mirada no había sido bastante.... y no me he muerto por ello, ni vivo traumatizada, ni nada de esas cosas que algunos padres opinan por ahí... nada, te lo aseguro, si acaso me hace gracia por eso de que ahora estoy en su papel y la entiendo mejor.

También hemos vivido situaciones en la que Paula me entiende con una mirada. Ella no sabe porqué, pero sabe que tiene que salirse de allí o callarse, por ejemplo. Al principio te cortaba mucho pues decía "mamá, ¿qué me quieres decir con esa mirada?"....y tú hacías "glup!!"....Hoy ya no, hoy está explicado y simplemente actúa. Luego me pregunta y por supuesto, obtiene su respuesta,... pero después.

Un beso....Sight's Power (o lo que es lo mismo, El Poder de una Mirada....de los papás)