12/5/10

Animales de costumbres

Cuando comienza un nuevo día, todos somos animales de costumbres. Nos gusta dormir en el mismo lado de la cama, quizás una ducha en la mañana, quizás en la tarde, sentarte en la misma silla para comer, escoger esa parte de sofá que tiene puesto tu nombre donde se ponen las posaderas, ir al trabajo siempre por la misma carretera cuando hay otras opciones, leer antes de dormir, aparcar el coche en el mismo sitio ( si se puede), ese cafetito antes de ponerte a trabajar…. en fin, hábitos integrados en nuestra rutina que nos dan orden y seguridad. ¿Quién no se ha olvidado algo en casa por no haberlo dejado en el sitio adecuado la noche de antes?...yo, muchas veces.

Donde vivo, puedo aparcar perfectamente cerca de casa, allí no existe el problema de aparcamiento que sí hay en el centro de la ciudad. Sin embargo es curioso cómo de una manera inconsciente, me dirijo siempre “a mi sitio” si está vacío. Podría ir a cualquier otro, pero no….me dirijo hacia allí. Que digo yo que no es mío, obviamente Es un espacio disponible para cualquier vecino que quiera aparcar allí. Pero debo ser animal de costumbre, porque si está vacío, pongo el piloto automático y me dirijo para allá de manera inconsciente. Es más, sin yo decir nada, cuando mis hijos ven que está ocupado por otro vehículo me dicen “¡mamá, te han quitado el sitio!”…”que no, que ese sitio no es mío”….glup.

Es posible que tú también seas un animal de costumbres como yo.

Un beso habitual, ya sabes.

2 comentarios:

Mar dijo...

Aquí otro animal de costumbres con aparcamiento publico reservado jajaja, y en mi caso son dos si uno no está es el otro pero si me lo quitan hasta me enfado. Jajaja, es lo bueno de no tener problemas de aparcamiento.

Elena dijo...

Mar, ¿dos?..tía, lo tuyo es avaricia.ja,ja...