Hacía tiempo que no le pasaba y anoche tocó. Todo iba bien, como una noche normal. Ducha, cena y a la cama. Pero antes de que yo me acostara, vino a verme y es que en cuánto se nota uno, sabe que mamá/papá se lo tenemos que “analizar y observar”. Me buscó con un “mamá, me ha salido un grano”……¡Ostias! Eso no era un granito, era un buen relieve blanco con gran reacción roja en el gemelo. Estaba teniendo de nuevo, una reacción alérgica.
Rápido fui a por LACTISONA (que es una cremita al 2% de corticoides y que le alivia el picor) y a por una pastilla de POLARAMINE, para frenarle la reacción alérgica. En lo que fui al botiquín y le echaba la crema sobre el grano, empezó a decir “y aquí.. y aquí también mamá ”. Le desnudé y observé cómo le brotaban más granos… y otro y otro …todos grandísimos, todos blancos en relieve con zona caliente roja. Polaramine dentro del cuerpo ¡YA! y yo contándole los granos mientras busco y rebusco para echarle más cremita. Sólo uno tenía un punto de sangre y ése era el picotazo originario de su reacción alérgica. El resto eran brote. No podía ser que anoche (pues tocó cambio de camas quitando los edredones), hubiera en su habitación tanto mosquito que provocara esos granos. Con la ventana un poco abierta, uno le debió picar y provocó su reacción alérgica. Le metí en la cama grande mientras eché spray anti-mosquitos en su habitación, para que se muriera cualquier bichito cabrón que le hubiera picado. Parece que el enchufe anti-mosquitos, no le vale de mucho….¡lástima!.
La noche ha sido buena y ésta mañana, los granos eran la sombra de lo que fueron anoche. No obstante, porque sé que su cuerpo puede seguir reaccionando, le he dado otro antihistamínico, EBASTEL, que es más suave (es el que me tomo yo para la alergia al polen). Me decía cuando se ha levantado, que algo le picaban todavía, pero vamos, te lo digo yo….¡sombra de los de ayer!.
Aitor ha llegado a tomarse un bote de jarabe de Polaramine en los 5 días que hemos pasado en el camping de unos amigos. Si paraba de dárselo, le volvían a brotar. Ahora que ya es más mayor, es mucho más cómodo tomar el Polaramine en pastillas. El alergólogo nos contó, que sabiendo ya que es alérgico a un tipo de picadura difícil de detectar, he de tenerle siempre cerca sus dos medidas para cortar la reacción. A veces le pica un mosquito y no reacciona, pero otras veces sí.
No las llevo contadas, pero pudiera ser la octava reacción de ésta envergadura. Lo bueno, es que hemos ido cerrando el círculo de posibilidades alérgicas (con pruebas médicas incluidas), hasta llegar a la de “picadura de insecto”….¡qué coñazo, pobre mío!.
¡Qué intuición tenemos las madres!. 1ª vez, urgencias, niño con muchos granos (algunos evolución de 2 días), granos tremendos, distintos tamaños, incluso de color, zona conjunta (muñeca) de 3 granos deformada, enfermeras que le hacen fotos, nos derivan por urgencia al especialista de piel creyendo que el niño tiene una enfermedad seria…. Y yo, erre que erre “Que no, que no, que al niño le BROTAN GRANOS (no sabía el porqué, pero cada día tenía más). Le salen por cualquier sitio. Como si fuese una reacción de la sangre. La diferencia de color y tamaño indica los días de vida del grano”….y el especialista que NO, que es un bicho que le picó muchas veces y que desinfecte su habitación, que le diera Polaramine y Lactisona. Vuelta a casa, los granos remiten gracias al antihistamínico, desinfecto su alcoba tremendamente, para darme cuenta la siguiente vez (2ª reacción), que en Cádiz también le pasa. Y como madre ya sabe lo que funciona, nos ponemos a investigar de médicos EL PORQUÉ de su reacción de ésta manera con granos tan grandes, mientras mi chico se calma con su jarabe haciéndole efecto ipso-facto …. Hasta hoy.
En fin, un beso sin reacción alérgica….seguro que tú también eres intuitiva/o.