25/11/08

Una tutoría

Después de la tormenta, viene la calma. Otro punto de vista es sano, una opinión de docente es necesaria para entender e interpretar actuaciones de nuestros hijos.

El otro día volvía al trabajo mas tranquila, y ello fue gracias a la tutoría que tuve en el cole.

Intercambiar opiniones, entenderlas y respetarlas, es necesario para crear un buen entorno a nuestros hijos. No somos docentes, al menos yo no conozco de libro los pasos de un niño, la experiencia es otro cantar, ahí cada uno tiene la suya, pero es bueno saber en qué momento está nuestro hijo dentro de su fase de crecimiento, no físico, sino mental.

También nuestras reacciones parten de nuestras propias experiencias, y como se suele decir, por "defecto profesional" así actuamos (mi reacción al otro día). De veras me gustó compartir un ratito con la tutora de mi hijo.

Aitor es un tío majo, cabezón, pero buena gente. Cuando vamos por la calle y se cruza con alguién de clase, oigo ¡¡Aitor, Aitor!! con un entusiasmo tal, que hace que piense que éste cabezón se gana a sus amigos, y es que como es tan grande, yo creo que le tienen de "patriarca", ja,ja....

En fin, que momentos de alteración con nuestros hijos tenemos y seguiremos teniendo, pero no por ello merma un ápice nuestro amor por ellos. Ellos son nuestro mayor tesoro.

Un beso.




2 comentarios:

Dudu dijo...

Siempre la opinión de un profesional es importantísima. En el cole de Alejandra están intentando montar por segundo año la Escuela de Padres. Y por supuesto que me apuntaré a ella, que los hijos no traen libro de instrucciones.
Un abrazo para Aitor

Mar dijo...

Jajaja, ¿y cuantas veces no hemos pedido el famoso libro? Es cierto que nos queda mucho que aprender pero que se agradece poder comentar nuestras dudas con los profesores, otros papis y abuelos, cada undo en su medida tiene algo que aportar.